POJAZZ EN


miércoles, 24 de febrero de 2010

SARNATH SIGUE AQUÍ, CON NOSOTROS DENTRO



Seguimos en Sarnath, llevamos cuatro días, en realidad no hay mucho que contar, más que paseamos, entramos en templos y conocemos los mejores lugares para comer, descansar y husmear, además de hacer amistades con los lugareños.
Conviven tanto hindúes como tibetanos modestamente, hay puestos de frutas, souvenirs, saris y un puesto en el que nos ha llamado poderosamente la atención. El lugar es pequeño y un señor se dedica a pintar mandalas a mano, de un trabajo y precisión descomunal. Son poderosamente bellos e hipnotizan tanto como las tablas de mármol que encontramos en Agra.
Ya casi no nos fijamos en los niños que piden en la calle, ni ellos en nosotros pues saben que no damos dinero, pues es una especie de negocio y desde que los niños comienzan a caminar los sueltan con un vasito de metal a buscar dinero. Te puedes tropezar con una niña de unos diez años cargando a un niño de siete meses pidiéndote. Esto no sucedería si no vieran el lucro de parir para pedir. PG aboga por la esterilización.
Hay un habitáculo de unos siete metros cuadrados muy caótico donde regentado por un señor tibetano, hace los mejores tandor que he probado en mi vida, así que comemos y cenamos probando todo tipo de comidas por unos dos euros.
Luego, sesión de enfrentamiento con las páginas de mi libreta, escribiendo para PoJazz, para el blog y el poemario. PG pasea por jardines y realiza fotos bellísimas sin parar.
Al final, nos quedamos más días de los previstos, y hemos consensuado cambiar de rumbo y tirar al este del Rajastan, a visitar Jaipur, Pushcar y donde el viento nos lleve.
Ya tenemos el billete, y mañana día veinticuatro partimos, con veintidós horas de tren hay que desandar lo andado, pero así habremos visto media India pues nos quedan los últimos doce días.
En cuanto al museo arqueológico de Sarnath, se relatara al final del viaje junto con la impresión del Taj Majal, solo comentar que aquí hay un monumento a Tara, solo que mas antigua que la canaria sobre quinientos años de suso, digo cristo, también esta más buena.

Desde un esqueje del árbol de Bo, desde el que buda dio su primer sermón,
Russo Rodríguez para los estudios centrales de PoJazz.

No hay comentarios: